"Aquel cuyo nombre está escrito en el agua". Epitafio en la tumba de John Keats.
martes, 21 de marzo de 2017
TAGORE
Mañana de lluvia y cafetería.
Mientras la regadera de los cielos
insiste, machacona,
en anegar la calle
tomo distraído el periódico
que algún cliente abandonó.
Leo entre las efemérides
el ciento cincuenta aniversario
del nacimiento de Tagore.
Se añaden también algunos versos
de contenida pasión temblorosa.
Recuerdo que una vez
tuve un libro suyo,
allá en la adolescencia.
Supongo que se habrá
extraviado, junto a los sucesivos
ropajes de la edad.
De repente me asalta
el propósito de buscarlo,
aunque no sepa muy bien
por dónde comienzo
y a pesar de que la molestia
resulte probablemente inútil...
La noticia menciona
que en 1913, en una
ceremonia olvidada,
se le concedió el Premio Nobel.
Bueno, no tan olvidada,
porque yo, sin ir más lejos,
lo estoy considerando
como si hubiera sido ayer.
martes, 7 de marzo de 2017
ROMANZA EN CUATRO
Alas, fuego,
rojas lenguas,
serenata
que, violenta,
los balcones
de una celda
coge, asalta,
dobla, enreda,
agua en olas,
rota estrella,
carne dulce,
larga queja
que por vías
paralelas
corre y junta
dos ausencias:
fue mi ansia
-¿lo recuerdas?-
ágil daga,
rauda flecha...
Pero ahora,
costra seca,
gris brasero,
bicicleta
ya oxidada
de las venas,
torpe, gorda,
mosca terca,
que recorres
andariega
de mis muebles
la madera,
conocida,
sobria y vieja,
como mancha
que me impregna:
tus bastones,
¡oh, tristeza!,
paso a paso
mi piel llevan...
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